Cuando era niña mi padre me dejaba ver películas de terror. Avían unas que si me asustaban que me daban pesadillas y otras no. Un día de Halloween disidí ver la película de “Punkin Head” por la noche para celebrar el día feriado en casa. Comencé a ver la película mirando los personaje y como eran sus personalidades. En unos cuanto minutos ya tenia mi atención la película. Mirando los arboles alrededor de mi y notando que el bosque estaba en silencio. No cantos de pájaros ni si quiera la brisa existía por el bosque. Caminando por bosque tratando de buscar la salida para llegar a casa. Comenzó a anochecer, ya sabia que estaba en peligro si no salía del bosque a tiempo. En el proceso de buscar la salida me encontré un hombre. Fui cercas a el para pregúntale si sabia la salida del bosque. Cuando el hombre se voltio para mirar me su mano fue directo hacia mi garganta y me levanto al aire a la misma ves me estaba estrangulando. Comencé a moverme para escapar las manos del hombre. En el proceso de moviendo me, mide una figura acercándose hacia nosotros. Era Punkin Head el demonio que mata la gente. Me entro un miedo que pensaba que ya mi vida iba a terminar. Punkin Head le metió sus garras por la espalda al hombre roncando le el corazón. Cuando eso paso me caí al suelo. Comencé a correr para escapar de Punkin Head que en el proceso encontré la salida a mi casa. Abrí la puerta y la seré rápido. Mi madre me preguntaba que es lo que me pasaba. No tenia palabras para explicarle lo que me a paso en el bosque. Cuando mire hacia el sofá me di de cuenta que estaba en el sofá durmiendo.
A veces, me gusta jugar muchos videojuegos. Algunos de mis amigos me dicen que los juego demasiado. Cuando yo estoy con mis amigos, a veces, yo doy a ellos los nombres de los personajes de Mass Effect tres. Si tú has visto la película Role Models, nosotros hemos jugado un juego similar a la de la película. Un grupo de nosotros nos jugamos el n7, los héroes, mientras que los otros se jugarían como miembros de los segadores, los chicos malos. Los segadores tratarían conquistar el mundo. Claro, mis amigos y yo trataríamos de tener a ellos. Si ellos ganaban, el juego era terminar hasta la próxima semana. Sin embargo, si nosotros ganábamos, el juego continuaba el próximo día. Cualquiera ganó el juego anterior se le permitió tener un jugador extra en su equipo. Así que había una razón para tratar de ganar. Ahora, nosotros no jugamos a este jugar
Hoy fue un día muy interesante en mi trabajo. Soy gerente de un restaurante muy famoso “Hooters”. Todos los días yo tengo que encontrar maneras para animar a empleadas. Son todas chicas. Algunos días son difíciles. Nuestra compañía tiene un concurso para todos los restaurantes. El restaurante que venda más calendarios que los otros restaurantes gana el concurso. Yo decidí hacer una propuesta a mis chicas. El reto es si las chicas pueden vender cien calendarios en un día, yo llevaría el uniforme de las chicas. Yo nunca pensaba que las chicas ganarían. El record para la compañía es cincuenta en un día. Yo quise que las chicas lo hagan bien. Para ellas, verme en su uniforme estaría muy gracioso. Para mí, estaría muy avergonzado. A las chicas les gustaba el reto. Ellas empezaron con mucho esfuerzo. Eran las dos de la tarde, las chicas han vendido cuarenta y cinco calendarios. Una de las chicas que dice me: ¿Estás nervioso? Yo sonrió y yo respondí: ¡Nunca! Mientras pasaba el día, vendían muchos calendarios. Yo nunca me di cuenta que las chicas lo harían. Al final del día, las chicas habían vendido ciento y catorce calendarios. Dios Mío, ahora yo tengo que llevar el uniforme. Yo estaba muy avergonzado. El uniforme de las chicas es una blanca camisa pequeña, los pantalones de cortos naranjos también pequeña, y las medias. Mis empleadas son reían de mí. Fue muy gracioso. Yo diría que yo no lleva bien en el uniforme de mis empleadas. Cuando yo dije a mi jefe que habíamos vendido ciento y catorce calendarios él estaba muy contento, pero él me preguntó ¿Cómo? Yo le envié la foto. La foto explicó todo, yo no necesito decir más.
Erase una vez un día cálido que recuerdo tener mucha calma alistándome. Esa mañana tenía un vuelo que iba hacia Atlanta, Georgia y después a Madrid, España. La noche anterior había organizado todas las cosas necesarias que necesitaba llevarme para estudiar un semestre en España. Esa mañana tenía con tanta emoción por tener todo listo decidí jugar video juegos por horas con mucha tranquilidad. Finalmente mi padre me sugirió que nos fuéramos al aeropuerto cuando faltaba dos horas para que despegara mi vuelo. Cuando llegue al aeropuerto iba muy confiado y emocionando porque comenzaría la aventura de mi vida. Cuando voy a facturar mi maleta en la aerolínea y cuando el empleado de la aerolínea me pidió mi pasaporte me vengo dando cuenta que traía el pasaporte equivocado, era el de mi hermana. No podía creer que me había traído el pasaporte de mi hermana. En ese momento sentí un nudo en mi garganta y que se me iba para el corazón. Estaba tan sorprendido que no podía reaccionar y creí que perdería mi vuelo y ya no podría ir a estudiar a España. Por fortuna mi padre tuvo la valentía de reaccionar y regresar a casa por mi pasaporte y entregármelo a tiempo para alcanzar mi vuelo.
Mi memoria tiene una forma de alterar los acontecimientos del pasado, pero voy a intentar a mi mejor esfuerzo para volver a contar un suceso de mi vida que todavía vive lívido en mi mente, como un brasa ardiente de luz que el viento no puede apagar. Era un día como cualquier otro día en el año 1927. Me desperté a la madrugada de la mañana y abrí los ojos lentamente para ver que el dial ya empezó, pero yo me quede en la cama con ninguna intención de levantarme. Oí el ruido de la calle debajo de mi ventana--el sonido de las ruedas de los vagones de los mercados llena de fruta, las voces de los niños charlando con sus padres al camino a la escuela, y el sonido de los pasos de la gente yendo a cada dirección. Finalmente, me levante, me vestí, y salí de casa, al mundo real. En ese ano, era un escritor en una empresa pequeña editorial especializada en novelas infantiles. No era mi primera opción en la vida. Yo quería ser periodista para un periódico bien conocido o un autor de novelas de ficción del crimen, pero al igual que otras cosas, el destino tenía otros planes para mí. A pesar de que el viento frío soplaba en mi cara como dagas pequeñas en el aire con cada paso adelante que daba, yo seguía avanzando al trabajo con toda prisa porque ya estaba 15 minutos tarde. Entre en mi pequeña oficina en el otro extremo de la sala. A sentar en mi silla, me di cuenta que alguien dejo un libro encima de mi escritorio. Era un libro de tapa dura, con un borde dorado, bordes suaves, y una cubierta en blanco. Abrí el libro a ver las palabras “para la persona con todo en la vida, pero nada en absoluto,” escribido en la primera pagina. Se me hizo rara la expresión porque era una contradicción que no tenía sentido. Volví la página y comencé a leer el primer párrafo. No sé exactamente que me paso, pero en ese momento mi estómago comenzó a girar y mi mente se sentía como si estuviera a punto de perder todo sentido de la realidad. Me levante rápidamente y cerré el libro. No lo podía creer. ¿Es posible? Me pregunté a mí mismo. ¿Cómo puede ser que alguien a escribido de mi vida, como si yo fuera el personaje principal de su cuento, como si mi vida fuera solamente la imaginación de alguien más? Mis piernas estaban a punto de ceder y yo estaba a punto de colapsar cuando agarre la silla y me senté. “No lo puedo creer,” fueron las palabras que seguí repitiendo en mi mente.
Pero en ese momento se me ocurrió algo. Si el libro es un cuento de mi vida, entonces si sigo leyendo hasta al final yo podría saber como toda mi vida se desarrolla, y cuando llego al final, sabrá de mi muerte y tal vez lo podría cambiar. Y no solo eso, también cambiara momentos en mi vida, errores que voy hacer en el futuro, y corregirlos antes de que pasan. “Mi vida sería completamente perfecto,” me dije a mí mismo. Sin errores o defectos, pero más importante, sin pensar en lo que podría haber sido en la vida. Me quede sentado en la silla por muchas horas pensándolo. “Usted puede hacerlo, ¿sabes?,” me decía a mí mismo. Cuando la hora llego del final del trabajo, salí corriendo a casa con el libro en mano con tanta prisa que nunca he tenido en mi vida. Cuando llegue a casa, cerré la puerta, comencé la chimenea y me senté en mi silla de cuero. Me senté allí durante horas mirando el fuego con el libro nunca dejando mis manos. “No,” me dije a mí mismo. “Si lees este libro en total, te la has engañado tu paso por la vida y usted nunca será el mismo. Si las cosas no son como usted quisiera que fueran en este momento de tu vida, es tu culpa por no tener el valor de ellos desde el principio.” En ese momento, tome el libro en mis manos y lo mire por última vez, luego lo tire al fuego y observe las llamas engullir las páginas del libro. El próximo día, renuncie a mi trabajo en la empresa y comencé escribiendo mi primer libro de ficción del crimen.
Cuando era una niña yo jugaba muchas deportes. Yo jugaba el fútbol, el baloncesto, y el volibol. Mi deporte favorito era el baloncesto. Mi primero equipo de baloncesto se llama los águilas. Eso equipo era mi favorito equipo porque mi padre era el entrenador del equipo. Mi padre siempre me decía que "Si tu haces diez puntos en un juego, voy llevarte a un juego de los Lakers." Cada juego yo probaba a hacer diez puntos, pero yo nunca podía hacerlo. Yo practicaba mucho durante el día y durante la noche porque yo querría ver los Lakers. Un día antes de mi juego yo practicaba para dos horas. Yo estaba seguro que yo podría hacer diez puntos eso día. Y al final de mi juego yo hacia diez puntos. En eso día yo aprendí que cuando tu practicas mucho, tu puedes hacer cualquier tu quieres. Yo estaba muy feliz porque yo veía un juego de los Lakers dos días después de mi juego.
Erase una vez, había un pueblo muy pequeña en las montañas. Las montañas eran tan altas que siempre estaban rodeadas por las nubes. Nunca podría ver el sol. Era una semana a pie a la ciudad más cerca. Esta era mi hogar. Mi familia y once otras personas vivíamos aquí juntos. Nosotros crecíamos nuestra comida y vivíamos de la tierra. Mis únicos amigos eran los animales que vivían aquí y mi perrito que se llama Lobo. Nuestra vida era muy simple y me gustaba así.
Una día, cuando yo fui a sacar agua del pozo con Lobo, yo vi a un hombre desconocido y vestido de negro quién estaba caminando al pueblo. Su cara estaba completamente escondido y tenía algo extraño en su mano. Él parecía peligroso y Lobo podría sentir mi miedo. Me cayó el cubo lleno de agua y corrí rápida a mi casa para advertir a mi familia. Pero Lobo no me siguió. Él corrió directamente al posterior del hombre. Saltó a la espalda del hombre y empezó a atacar. Cuando el desconocido se dio cuenta de lo que estaba pasando, era demasiado tarde. Lobo nos había salvado de este hombre malo. Era un día que no nunca podría olvidar.
Este es una historia muy extraño de mi tiempo en las cuevas de Nuevo México. Yo voy a las cuevas uno o dos veces cada año y pasar uno o dos semanas allí explorando con mis amigos. Esta vez va a diferente. Estamos más hondo que cada vez antes. La luz está fallando y no tenemos más. La cadena que usamos para volver a la superficie esta cortada y estamos irremediablemente perdidos. No sabemos quien cortada la cadena pero escuchamos algo abajo el paso. Mi amigo grita para ayuda pero no podemos oír cualquier cosa ahora. Él cree que debemos ir en la dirección del sonido. Yo digo que no creo el sonido es de una persona. Pero espera, allí esta el sonido otra vez, mas cerca de antes. Estamos totalmente callados y puedo oír la respiración y el arrastramiento de pies. “¿Hola? ¿Quien es allí?” Yo digo. No respuesta, solamente la respiración y el arrastramiento de pies. La luz esta muerta y no podemos ver cualquier cosa. El oscuro es opresivo y nuestra amiga esta llorando silenciosamente. Ahora mi amigo mas cerca de el sonido suelta un grito. “¡Corre!” él dice. La próxima cosa que sé somos en la luz del día. Mi amigo tiene una mordida en su brazo. Él limpia la sangre de su brazo y desmayarse. Yo veo a su brazo y veo la razón. ¡La mordida era de un hombre!
Todo lo que ocurrió fue pasando ante mis ojos. Pensé que era el final. Fue en un día como cualquier otro día. Otoño se acercaba, pero el tiempo de verano hacía parecer como si apenas empezó el verano. Estaba soleado y hacía mucho calor afuera, pero también había una ligera brisa fresca que sopla de vez en cuando y calmaba la gente. Decidí llamar a mis amigos del barrio para ver si podíamos disfrutar de nuestros últimos días de libertad antes de tener que ir a la prisión conocida como "Rosemont Middle School." Como grupo hemos decidido hacer una última vuelta junto con la banda. Rodamos por los barrios sin destino, sin causa, sin reglas. Claro que nadie nos conocía y nos miran como si fuéramos niños pequeños y muy extraños pero éramos rebeldes, rebeldes montados en bicicletas de diez velocidades. Rodamos hasta que llegamos a una casa distante con mucha propiedad, propiedad suficiente para mantener a los animales de granja. Estábamos familiarizados con los animales pero este día había un nuevo invitado allí que nos miraba como si él nos estaba desafiando, diciéndonos que él era el jefe. A mí no me importaba y simplemente lo ignore, pero mi pobre amigo, él lo tomo como un desafío y decidió enfrentarse a él. Mi amigo se acercó a la puerta y comenzó mirar fijamente a su enemigo, la cabra del infierno. Le advertí que no le burlaba mucho pero no me escucho. Empujó a la cabra y presentó su posterior a la cara de la cabra. Él estaba provocando la cabra al ataque, pero estaba seguro de que nada iba a pasar porque había una cerca que los separaba. Pero poco supo mi amigo de que no se trataba de una cabra común sino que una cabra inteligente y vengativa. La cabra era capaz de deslizarse debajo de la cerca y pudo conocer a mi amigo con el propósito de quitarle la vida. Pensé que era el fin de mi amigo, pero antes de que me diera cuenta, la cabra se dirigía a mi cuarto para relajarme. dirección. Pero ¿por qué? No tenía ni idea de cómo sucedió, pero yo también estaba burlándome de la cabra con mi posterior. Tal vez lo hice para salvar a mi amigo o porque yo era un rebelde hasta el tuétano. Pero no había tiempo para pensar. Me subí a mi bicicleta y pedaleé tan rápido que se me quebró me bicicleta. La cabra del infierno vino a mí con gran ferocidad con sus ojos fijados en destruirme. Fui corriendo a toda velocidad que se me gastaron los zapatos pero al final pude escapar de los cuernos de la cabra del infierno. No tenía ni idea de donde mis amigos estaban pero no tenía tiempo para buscarlos y decidí volver a casa. Llegué tan cansado que no comí mi cena y fui directamente a mi cuarto para relajarme.
No tuve tiempo para reaccionar. Tan pronto como me volví hacia la ventana, la cabra brinco hacia mí estrellando la ventana apuñalándome con sus cuernos de fuego. ¡Despierta que vas a llegar tarde a la escuela! ¿Por qué estoy sudando tanto? Te dije que dejaras de comer jalapeños antes de ir a la cama porque te da pesadillas. Así que entonces era un sueño. Bueno supongo que ya no voy a comer jalapeños antes de ir a la cama. Ahhhhhh! ¿Qué es toda esta sangre debajo de mi cama? ¡Oh no! ¡Son mis amigos! ¿Quién podría hacer una cosa así? Baahhh!! ¡La cabra! Es imposs-- . ¿Por qué estoy sangrando? Me ha encajado los cuernos en mi abdomen y me estoy muriendo. Adiós mundo cruel. Baahhhh!!
Puedo oler el sudor de mi caballo, Viajero, en mis fosas nasales. Puedo sentir el color de su cuello en mi cara. Puedo ver Viajera está cansado. Él no puede continuar, yo creo. Él está respirando con fuerza y está corriendo despacio ahora. Yo miro detrás. No veo nada, pero yo puedo oír los gemidos y gruñidos. Miro adelante y pateo mi caballo, pero Viajero no puede. Él se desploma. No tengo tiempo para pensar. Cojo mi escopeta y corro. Corro y corro. Ahora yo oigo mi caballo. Yo nunca oí mi caballo grita como es. Doblo la esquina. Es un callejón sin salida. Pongo mi espalda en la pared y cargo mi pistola y escopeta. Yo puedo oír ellos. Son cercos. Las balas sienten bien en mis manos temblorosas. Yo puedo olor ellos y su carne podrido ahora. Levanto mi pistola. Las figures horribles doblan la esquina. Disparo mi pistola rápidamente. Seis caen. Suelto mi pistola y apunto mi escopeta. Disparo. Dos más caen. Hay demasiado. Los latidos de mi corazón tienen fuerzo. Ellos son muy cercos. Oigo un sonido muy fuerte. Miro. Todos son caen, sin Viajero, a quien sus ojos rojos están brillando en la neblina de la noche.
Nunca he dicho el cuento de mi tiempo en espacio. Pero, me estoy acercando el fin de mi vida y, por eso, creo que es la hora poner en mi diaria que ocurría.
Hace muchas lunas cuando yo fui a espacio. Mi misión era estudiar los agujeros negros y qué estaba dentro, si posible. Yo sabía que no me podía entrar o nunca volvería, y por eso, mi misión aparecía imposible. Pero, yo sabía que si yo quiera ser el mejor astronauta, yo tendría que encontrar algo nuevo. Una nueva parte de ciencia…”¿Qué puedo descubrir?” yo pensaba conmigo mismo. Cada día no sabía. Yo estaba en espacio por un año antes del evento que cambió mi vida.
Un día, yo vi algo que nunca había visto en mi vida. Luces de colores diferentes girando alrededor de un agujero negro. En nuestras vidas, sabemos que la galaxia gira alrededor del sol. Pero aquí, parecía como todo el universo giraba alrededor de aquel agujero negro. Creo que yo miraba a la escena por tres horas. Yo hubiera mirado por más tiempo pero mi atención fue disturbada por un meteoro grande. No podía creer que estaba viendo, pero el meteoro pegó el ala de mi astronave. No me sentí nada porque no hay gravedad en espacio, pero yo pude ver que mi astronave iba para el agujero negro. Me sentía más y más gravedad hasta yo desmayé.
La próxima cosa recuerdo es que estaba rodeado de luces, y me dijo una Voz, “Ahora, no es tu hora. Regresa y no te preocupas sobre cosas de ciencia, pero cosas de tu familia y tu vida.”
Cuando me desperté, estaba cayendo a la tierra. Recordaba mi práctica y me expulsé de la astronave. Me cogió NASA pero yo estaba solo tres kilómetros de la facilidad.
La próxima semana yo fui a cenar con mi familia. Los sentamientos fueron muy diferentes después del consejo de La Voz, y yo nunca había estado más contento en mi vida. Al final de la noche, con toda mi familia presente, yo vi una mujer. Su pelo largo rubio, sus ojos brillantes, y su sonrisa robaron mi corazón, y en aquel momento, cuando ella miró a mí, yo supe que ella sería mi esposa.
Mi nombre no es importante. En verdad nada de mi es importante. Yo solamente soy una parte de lo que existe afuera de tu visión. Vivo en la oscuridad, en la sombra que es un poco más oscura que la noche. Existo en el perfil de tu visión. No quiero atención, no quiero nada. Me muevo rápidamente por el cuarto, mis pasos casi silencios. Solo ratas, piensas, nada mas. Solo la casa acomodándose. No hay razón que me tengas miedo. No soy como los otros. A veces me acomodo en una esquina del cuarto que no recibe mucha luz o en último rincón del armario. No hago mucho ruido, no quiero que te des cuenta de mi presencia. Si me pones atención otras cosas te pueden poner atención, y luego que. Si algo te pasa que tengo para divertirme. No te preocupes, cierra los ojos es solamente tu imaginación. Has me un favor y no leas ese libro, el latín me da un dolor de cabeza, y esa yerba que quemas huele mal, quien te dijo que la salvia era perfume. Estas más tranquilo. Estoy feliz que el perfume trabajo aunque me da un dolor de cabeza. Perdón que haga tanto ruido es que como no me siento bien han llegado mis amigos. Te quieren conocer pero sé que todavía no ha pasado suficiente tiempo. Pronto. Si pronto los conocerás. Creo que te gustaran. Los otros alquiladores no les gustaron pero tengo un buen presentimiento de ti. Me tengo que ir pero no te preocupes, te veo pronto.
Cuando era niña iba todos los veranos cuando tenía tres años hasta cuando tenía casi trece años a Bolivia. Iba para visitar mis abuelos y mi familia allí. Tengo una hermana y un hermano y un primo y una prima todos mayores que iba allí con. Una vez cuando tenía cinco años estaba en un pequeño pueblo, que se llama El Valle, cerca de la cuidad Tarija. Tarija es la cuidad donde nació mi abuela y donde vive la mayoría de mi familia. En esto pueblo mi familia tenemos una casa, una bodega, y una iglesia. Esta vez cuando tenía cinco años, ¨los cinco primos¨ (yo, mi hermanos, y dos primos) estábamos saliendo de la casa para ir a nuestra iglesia. Los otros empezaron a correr por la calle pero mi primo quedó conmigo para cuidarme. ¡Decidí a cruzar la calle cuando de repente un toro estaba corriendo al mismo lado! Mi primo me levantó y apenas mi salvó. Fue el día más espantoso de todo mi vida.
Cuando era niña mi padre me dejaba ver películas de terror. Avían unas que si me asustaban que me daban pesadillas y otras no. Un día de Halloween disidí ver la película de “Punkin Head” por la noche para celebrar el día feriado en casa. Comencé a ver la película mirando los personaje y como eran sus personalidades. En unos cuanto minutos ya tenia mi atención la película. Mirando los arboles alrededor de mi y notando que el bosque estaba en silencio. No cantos de pájaros ni si quiera la brisa existía por el bosque. Caminando por bosque tratando de buscar la salida para llegar a casa. Comenzó a anochecer, ya sabia que estaba en peligro si no salía del bosque a tiempo. En el proceso de buscar la salida me encontré un hombre. Fui cercas a el para pregúntale si sabia la salida del bosque. Cuando el hombre se voltio para mirar me su mano fue directo hacia mi garganta y me levanto al aire a la misma ves me estaba estrangulando. Comencé a moverme para escapar las manos del hombre. En el proceso de moviendo me, mide una figura acercándose hacia nosotros. Era Punkin Head el demonio que mata la gente. Me entro un miedo que pensaba que ya mi vida iba a terminar. Punkin Head le metió sus garras por la espalda al hombre roncando le el corazón. Cuando eso paso me caí al suelo. Comencé a correr para escapar de Punkin Head que en el proceso encontré la salida a mi casa. Abrí la puerta y la seré rápido. Mi madre me preguntaba que es lo que me pasaba. No tenia palabras para explicarle lo que me a paso en el bosque. Cuando mire hacia el sofá me di de cuenta que estaba en el sofá durmiendo.
ResponderEliminarA veces, me gusta jugar muchos videojuegos. Algunos de mis amigos me dicen que los juego demasiado. Cuando yo estoy con mis amigos, a veces, yo doy a ellos los nombres de los personajes de Mass Effect tres. Si tú has visto la película Role Models, nosotros hemos jugado un juego similar a la de la película. Un grupo de nosotros nos jugamos el n7, los héroes, mientras que los otros se jugarían como miembros de los segadores, los chicos malos. Los segadores tratarían conquistar el mundo. Claro, mis amigos y yo trataríamos de tener a ellos. Si ellos ganaban, el juego era terminar hasta la próxima semana. Sin embargo, si nosotros ganábamos, el juego continuaba el próximo día. Cualquiera ganó el juego anterior se le permitió tener un jugador extra en su equipo. Así que había una razón para tratar de ganar. Ahora, nosotros no jugamos a este jugar
ResponderEliminarHoy fue un día muy interesante en mi trabajo. Soy gerente de un restaurante muy famoso “Hooters”. Todos los días yo tengo que encontrar maneras para animar a empleadas. Son todas chicas. Algunos días son difíciles. Nuestra compañía tiene un concurso para todos los restaurantes. El restaurante que venda más calendarios que los otros restaurantes gana el concurso. Yo decidí hacer una propuesta a mis chicas. El reto es si las chicas pueden vender cien calendarios en un día, yo llevaría el uniforme de las chicas.
ResponderEliminarYo nunca pensaba que las chicas ganarían. El record para la compañía es cincuenta en un día. Yo quise que las chicas lo hagan bien. Para ellas, verme en su uniforme estaría muy gracioso. Para mí, estaría muy avergonzado. A las chicas les gustaba el reto. Ellas empezaron con mucho esfuerzo. Eran las dos de la tarde, las chicas han vendido cuarenta y cinco calendarios. Una de las chicas que dice me: ¿Estás nervioso? Yo sonrió y yo respondí: ¡Nunca!
Mientras pasaba el día, vendían muchos calendarios. Yo nunca me di cuenta que las chicas lo harían. Al final del día, las chicas habían vendido ciento y catorce calendarios. Dios Mío, ahora yo tengo que llevar el uniforme. Yo estaba muy avergonzado. El uniforme de las chicas es una blanca camisa pequeña, los pantalones de cortos naranjos también pequeña, y las medias. Mis empleadas son reían de mí. Fue muy gracioso. Yo diría que yo no lleva bien en el uniforme de mis empleadas. Cuando yo dije a mi jefe que habíamos vendido ciento y catorce calendarios él estaba muy contento, pero él me preguntó ¿Cómo? Yo le envié la foto. La foto explicó todo, yo no necesito decir más.
Erase una vez un día cálido que recuerdo tener mucha calma alistándome. Esa mañana tenía un vuelo que iba hacia Atlanta, Georgia y después a Madrid, España. La noche anterior había organizado todas las cosas necesarias que necesitaba llevarme para estudiar un semestre en España. Esa mañana tenía con tanta emoción por tener todo listo decidí jugar video juegos por horas con mucha tranquilidad. Finalmente mi padre me sugirió que nos fuéramos al aeropuerto cuando faltaba dos horas para que despegara mi vuelo. Cuando llegue al aeropuerto iba muy confiado y emocionando porque comenzaría la aventura de mi vida. Cuando voy a facturar mi maleta en la aerolínea y cuando el empleado de la aerolínea me pidió mi pasaporte me vengo dando cuenta que traía el pasaporte equivocado, era el de mi hermana. No podía creer que me había traído el pasaporte de mi hermana. En ese momento sentí un nudo en mi garganta y que se me iba para el corazón. Estaba tan sorprendido que no podía reaccionar y creí que perdería mi vuelo y ya no podría ir a estudiar a España. Por fortuna mi padre tuvo la valentía de reaccionar y regresar a casa por mi pasaporte y entregármelo a tiempo para alcanzar mi vuelo.
ResponderEliminarMi memoria tiene una forma de alterar los acontecimientos del pasado, pero voy a intentar a mi mejor esfuerzo para volver a contar un suceso de mi vida que todavía vive lívido en mi mente, como un brasa ardiente de luz que el viento no puede apagar. Era un día como cualquier otro día en el año 1927. Me desperté a la madrugada de la mañana y abrí los ojos lentamente para ver que el dial ya empezó, pero yo me quede en la cama con ninguna intención de levantarme. Oí el ruido de la calle debajo de mi ventana--el sonido de las ruedas de los vagones de los mercados llena de fruta, las voces de los niños charlando con sus padres al camino a la escuela, y el sonido de los pasos de la gente yendo a cada dirección. Finalmente, me levante, me vestí, y salí de casa, al mundo real. En ese ano, era un escritor en una empresa pequeña editorial especializada en novelas infantiles. No era mi primera opción en la vida. Yo quería ser periodista para un periódico bien conocido o un autor de novelas de ficción del crimen, pero al igual que otras cosas, el destino tenía otros planes para mí. A pesar de que el viento frío soplaba en mi cara como dagas pequeñas en el aire con cada paso adelante que daba, yo seguía avanzando al trabajo con toda prisa porque ya estaba 15 minutos tarde. Entre en mi pequeña oficina en el otro extremo de la sala. A sentar en mi silla, me di cuenta que alguien dejo un libro encima de mi escritorio. Era un libro de tapa dura, con un borde dorado, bordes suaves, y una cubierta en blanco. Abrí el libro a ver las palabras “para la persona con todo en la vida, pero nada en absoluto,” escribido en la primera pagina. Se me hizo rara la expresión porque era una contradicción que no tenía sentido. Volví la página y comencé a leer el primer párrafo. No sé exactamente que me paso, pero en ese momento mi estómago comenzó a girar y mi mente se sentía como si estuviera a punto de perder todo sentido de la realidad. Me levante rápidamente y cerré el libro. No lo podía creer. ¿Es posible? Me pregunté a mí mismo. ¿Cómo puede ser que alguien a escribido de mi vida, como si yo fuera el personaje principal de su cuento, como si mi vida fuera solamente la imaginación de alguien más? Mis piernas estaban a punto de ceder y yo estaba a punto de colapsar cuando agarre la silla y me senté. “No lo puedo creer,” fueron las palabras que seguí repitiendo en mi mente.
ResponderEliminarPero en ese momento se me ocurrió algo. Si el libro es un cuento de mi vida, entonces si sigo leyendo hasta al final yo podría saber como toda mi vida se desarrolla, y cuando llego al final, sabrá de mi muerte y tal vez lo podría cambiar. Y no solo eso, también cambiara momentos en mi vida, errores que voy hacer en el futuro, y corregirlos antes de que pasan. “Mi vida sería completamente perfecto,” me dije a mí mismo. Sin errores o defectos, pero más importante, sin pensar en lo que podría haber sido en la vida. Me quede sentado en la silla por muchas horas pensándolo. “Usted puede hacerlo, ¿sabes?,” me decía a mí mismo. Cuando la hora llego del final del trabajo, salí corriendo a casa con el libro en mano con tanta prisa que nunca he tenido en mi vida. Cuando llegue a casa, cerré la puerta, comencé la chimenea y me senté en mi silla de cuero. Me senté allí durante horas mirando el fuego con el libro nunca dejando mis manos. “No,” me dije a mí mismo. “Si lees este libro en total, te la has engañado tu paso por la vida y usted nunca será el mismo. Si las cosas no son como usted quisiera que fueran en este momento de tu vida, es tu culpa por no tener el valor de ellos desde el principio.” En ese momento, tome el libro en mis manos y lo mire por última vez, luego lo tire al fuego y observe las llamas engullir las páginas del libro. El próximo día, renuncie a mi trabajo en la empresa y comencé escribiendo mi primer libro de ficción del crimen.
ResponderEliminarCuando era una niña yo jugaba muchas deportes. Yo jugaba el fútbol, el baloncesto, y el volibol. Mi deporte favorito era el baloncesto. Mi primero equipo de baloncesto se llama los águilas. Eso equipo era mi favorito equipo porque mi padre era el entrenador del equipo. Mi padre siempre me decía que "Si tu haces diez puntos en un juego, voy llevarte a un juego de los Lakers." Cada juego yo probaba a hacer diez puntos, pero yo nunca podía hacerlo. Yo practicaba mucho durante el día y durante la noche porque yo querría ver los Lakers. Un día antes de mi juego yo practicaba para dos horas. Yo estaba seguro que yo podría hacer diez puntos eso día. Y al final de mi juego yo hacia diez puntos. En eso día yo aprendí que cuando tu practicas mucho, tu puedes hacer cualquier tu quieres. Yo estaba muy feliz porque yo veía un juego de los Lakers dos días después de mi juego.
ResponderEliminarErase una vez, había un pueblo muy pequeña en las montañas. Las montañas eran tan altas que siempre estaban rodeadas por las nubes. Nunca podría ver el sol. Era una semana a pie a la ciudad más cerca. Esta era mi hogar. Mi familia y once otras personas vivíamos aquí juntos. Nosotros crecíamos nuestra comida y vivíamos de la tierra. Mis únicos amigos eran los animales que vivían aquí y mi perrito que se llama Lobo. Nuestra vida era muy simple y me gustaba así.
ResponderEliminarUna día, cuando yo fui a sacar agua del pozo con Lobo, yo vi a un hombre desconocido y vestido de negro quién estaba caminando al pueblo. Su cara estaba completamente escondido y tenía algo extraño en su mano. Él parecía peligroso y Lobo podría sentir mi miedo. Me cayó el cubo lleno de agua y corrí rápida a mi casa para advertir a mi familia. Pero Lobo no me siguió. Él corrió directamente al posterior del hombre. Saltó a la espalda del hombre y empezó a atacar. Cuando el desconocido se dio cuenta de lo que estaba pasando, era demasiado tarde. Lobo nos había salvado de este hombre malo. Era un día que no nunca podría olvidar.
Este es una historia muy extraño de mi tiempo en las cuevas de Nuevo México. Yo voy a las cuevas uno o dos veces cada año y pasar uno o dos semanas allí explorando con mis amigos. Esta vez va a diferente. Estamos más hondo que cada vez antes. La luz está fallando y no tenemos más. La cadena que usamos para volver a la superficie esta cortada y estamos irremediablemente perdidos. No sabemos quien cortada la cadena pero escuchamos algo abajo el paso. Mi amigo grita para ayuda pero no podemos oír cualquier cosa ahora. Él cree que debemos ir en la dirección del sonido. Yo digo que no creo el sonido es de una persona. Pero espera, allí esta el sonido otra vez, mas cerca de antes. Estamos totalmente callados y puedo oír la respiración y el arrastramiento de pies. “¿Hola? ¿Quien es allí?” Yo digo. No respuesta, solamente la respiración y el arrastramiento de pies. La luz esta muerta y no podemos ver cualquier cosa. El oscuro es opresivo y nuestra amiga esta llorando silenciosamente. Ahora mi amigo mas cerca de el sonido suelta un grito. “¡Corre!” él dice. La próxima cosa que sé somos en la luz del día. Mi amigo tiene una mordida en su brazo. Él limpia la sangre de su brazo y desmayarse. Yo veo a su brazo y veo la razón. ¡La mordida era de un hombre!
ResponderEliminarTodo lo que ocurrió fue pasando ante mis ojos. Pensé que era el final.
ResponderEliminarFue en un día como cualquier otro día. Otoño se acercaba, pero el tiempo de verano hacía parecer como si apenas empezó el verano. Estaba soleado y hacía mucho calor afuera, pero también había una ligera brisa fresca que sopla de vez en cuando y calmaba la gente. Decidí llamar a mis amigos del barrio para ver si podíamos disfrutar de nuestros últimos días de libertad antes de tener que ir a la prisión conocida como "Rosemont Middle School." Como grupo hemos decidido hacer una última vuelta junto con la banda. Rodamos por los barrios sin destino, sin causa, sin reglas. Claro que nadie nos conocía y nos miran como si fuéramos niños pequeños y muy extraños pero éramos rebeldes, rebeldes montados en bicicletas de diez velocidades. Rodamos hasta que llegamos a una casa distante con mucha propiedad, propiedad suficiente para mantener a los animales de granja. Estábamos familiarizados con los animales pero este día había un nuevo invitado allí que nos miraba como si él nos estaba desafiando, diciéndonos que él era el jefe. A mí no me importaba y simplemente lo ignore, pero mi pobre amigo, él lo tomo como un desafío y decidió enfrentarse a él. Mi amigo se acercó a la puerta y comenzó mirar fijamente a su enemigo, la cabra del infierno. Le advertí que no le burlaba mucho pero no me escucho. Empujó a la cabra y presentó su posterior a la cara de la cabra. Él estaba provocando la cabra al ataque, pero estaba seguro de que nada iba a pasar porque había una cerca que los separaba. Pero poco supo mi amigo de que no se trataba de una cabra común sino que una cabra inteligente y vengativa. La cabra era capaz de deslizarse debajo de la cerca y pudo conocer a mi amigo con el propósito de quitarle la vida. Pensé que era el fin de mi amigo, pero antes de que me diera cuenta, la cabra se dirigía a mi
cuarto para relajarme.
dirección. Pero ¿por qué? No tenía ni idea de cómo sucedió, pero yo también estaba burlándome de la cabra con mi posterior. Tal vez lo hice para salvar a mi amigo o porque yo era un rebelde hasta el tuétano. Pero no había tiempo para pensar. Me subí a mi bicicleta y pedaleé tan rápido que se me quebró me bicicleta. La cabra del infierno vino a mí con gran ferocidad con sus ojos fijados en destruirme. Fui corriendo a toda velocidad que se me gastaron los zapatos pero al final pude escapar de los cuernos de la cabra del infierno. No tenía ni idea de donde mis amigos estaban pero no tenía tiempo para buscarlos y decidí volver a casa. Llegué tan cansado que no comí mi cena y fui directamente a mi cuarto para relajarme.
undécima (eleventh) línea desde el fondo "cuarto para relajarme" fue un accidente y no debería de estar ahí
EliminarNo tuve tiempo para reaccionar. Tan pronto como me volví hacia la ventana, la cabra brinco hacia mí estrellando la ventana apuñalándome con sus cuernos de fuego.
ResponderEliminar¡Despierta que vas a llegar tarde a la escuela!
¿Por qué estoy sudando tanto?
Te dije que dejaras de comer jalapeños antes de ir a la cama porque te da pesadillas.
Así que entonces era un sueño. Bueno supongo que ya no voy a comer jalapeños antes de ir a la cama.
Ahhhhhh! ¿Qué es toda esta sangre debajo de mi cama? ¡Oh no! ¡Son mis amigos! ¿Quién podría hacer una cosa así?
Baahhh!!
¡La cabra! Es imposs-- . ¿Por qué estoy sangrando? Me ha encajado los cuernos en mi abdomen y me estoy muriendo. Adiós mundo cruel.
Baahhhh!!
Puedo oler el sudor de mi caballo, Viajero, en mis fosas nasales. Puedo sentir el color de su cuello en mi cara. Puedo ver Viajera está cansado. Él no puede continuar, yo creo. Él está respirando con fuerza y está corriendo despacio ahora. Yo miro detrás. No veo nada, pero yo puedo oír los gemidos y gruñidos. Miro adelante y pateo mi caballo, pero Viajero no puede. Él se desploma. No tengo tiempo para pensar. Cojo mi escopeta y corro. Corro y corro. Ahora yo oigo mi caballo. Yo nunca oí mi caballo grita como es. Doblo la esquina. Es un callejón sin salida. Pongo mi espalda en la pared y cargo mi pistola y escopeta. Yo puedo oír ellos. Son cercos. Las balas sienten bien en mis manos temblorosas. Yo puedo olor ellos y su carne podrido ahora. Levanto mi pistola. Las figures horribles doblan la esquina. Disparo mi pistola rápidamente. Seis caen. Suelto mi pistola y apunto mi escopeta. Disparo. Dos más caen. Hay demasiado. Los latidos de mi corazón tienen fuerzo. Ellos son muy cercos. Oigo un sonido muy fuerte. Miro. Todos son caen, sin Viajero, a quien sus ojos rojos están brillando en la neblina de la noche.
ResponderEliminarNunca he dicho el cuento de mi tiempo en espacio. Pero, me estoy acercando el fin de mi vida y, por eso, creo que es la hora poner en mi diaria que ocurría.
ResponderEliminarHace muchas lunas cuando yo fui a espacio. Mi misión era estudiar los agujeros negros y qué estaba dentro, si posible. Yo sabía que no me podía entrar o nunca volvería, y por eso, mi misión aparecía imposible. Pero, yo sabía que si yo quiera ser el mejor astronauta, yo tendría que encontrar algo nuevo. Una nueva parte de ciencia…”¿Qué puedo descubrir?” yo pensaba conmigo mismo. Cada día no sabía. Yo estaba en espacio por un año antes del evento que cambió mi vida.
Un día, yo vi algo que nunca había visto en mi vida. Luces de colores diferentes girando alrededor de un agujero negro. En nuestras vidas, sabemos que la galaxia gira alrededor del sol. Pero aquí, parecía como todo el universo giraba alrededor de aquel agujero negro. Creo que yo miraba a la escena por tres horas. Yo hubiera mirado por más tiempo pero mi atención fue disturbada por un meteoro grande. No podía creer que estaba viendo, pero el meteoro pegó el ala de mi astronave. No me sentí nada porque no hay gravedad en espacio, pero yo pude ver que mi astronave iba para el agujero negro. Me sentía más y más gravedad hasta yo desmayé.
La próxima cosa recuerdo es que estaba rodeado de luces, y me dijo una Voz, “Ahora, no es tu hora. Regresa y no te preocupas sobre cosas de ciencia, pero cosas de tu familia y tu vida.”
Cuando me desperté, estaba cayendo a la tierra. Recordaba mi práctica y me expulsé de la astronave. Me cogió NASA pero yo estaba solo tres kilómetros de la facilidad.
La próxima semana yo fui a cenar con mi familia. Los sentamientos fueron muy diferentes después del consejo de La Voz, y yo nunca había estado más contento en mi vida. Al final de la noche, con toda mi familia presente, yo vi una mujer. Su pelo largo rubio, sus ojos brillantes, y su sonrisa robaron mi corazón, y en aquel momento, cuando ella miró a mí, yo supe que ella sería mi esposa.
El resto es historia.
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ResponderEliminarMi nombre no es importante. En verdad nada de mi es importante. Yo solamente soy una parte de lo que existe afuera de tu visión. Vivo en la oscuridad, en la sombra que es un poco más oscura que la noche. Existo en el perfil de tu visión. No quiero atención, no quiero nada. Me muevo rápidamente por el cuarto, mis pasos casi silencios. Solo ratas, piensas, nada mas. Solo la casa acomodándose. No hay razón que me tengas miedo. No soy como los otros. A veces me acomodo en una esquina del cuarto que no recibe mucha luz o en último rincón del armario. No hago mucho ruido, no quiero que te des cuenta de mi presencia. Si me pones atención otras cosas te pueden poner atención, y luego que. Si algo te pasa que tengo para divertirme. No te preocupes, cierra los ojos es solamente tu imaginación. Has me un favor y no leas ese libro, el latín me da un dolor de cabeza, y esa yerba que quemas huele mal, quien te dijo que la salvia era perfume. Estas más tranquilo. Estoy feliz que el perfume trabajo aunque me da un dolor de cabeza. Perdón que haga tanto ruido es que como no me siento bien han llegado mis amigos. Te quieren conocer pero sé que todavía no ha pasado suficiente tiempo. Pronto. Si pronto los conocerás. Creo que te gustaran. Los otros alquiladores no les gustaron pero tengo un buen presentimiento de ti. Me tengo que ir pero no te preocupes, te veo pronto.
ResponderEliminarCuando era niña iba todos los veranos cuando tenía tres años hasta cuando tenía casi trece años a Bolivia. Iba para visitar mis abuelos y mi familia allí. Tengo una hermana y un hermano y un primo y una prima todos mayores que iba allí con. Una vez cuando tenía cinco años estaba en un pequeño pueblo, que se llama El Valle, cerca de la cuidad Tarija. Tarija es la cuidad donde nació mi abuela y donde vive la mayoría de mi familia. En esto pueblo mi familia tenemos una casa, una bodega, y una iglesia. Esta vez cuando tenía cinco años, ¨los cinco primos¨ (yo, mi hermanos, y dos primos) estábamos saliendo de la casa para ir a nuestra iglesia. Los otros empezaron a correr por la calle pero mi primo quedó conmigo para cuidarme. ¡Decidí a cruzar la calle cuando de repente un toro estaba corriendo al mismo lado! Mi primo me levantó y apenas mi salvó. Fue el día más espantoso de todo mi vida.
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